Nunca me he parado a pensar en mi árbol genealógico, si me pongo a pensar tengo vagos recuerdos de familiares cercanos que hace muchos años que no veo .. recuerdo un señor con pelo blanco que algún domingo venia a casa de mi abuela, me hacia escribir en una libreta letras y números, creo que era un hermano de ella, no se.. no lo tengo muy claro.. lo que si que tengo clarisimo ,es la imagen de ese comedor lleno de gente todos sentados alrrededor de una gran mesa.
se suponía que era mi familia, murió la abuela de mi madre y esa gente dejo de venir, creo que no me importo demasiado dejar de verlos una vez cada no se cuanto, así que aquella mesa se cambio por otra mas pequeña, de ella recuerdo cuatro enanos sentados, mi prima, mi primo, mi hermano y yo.. -hemos crecido juntos por circunstancias que ahora no vienen al caso, pero que dan para una novela..- y dos adolescentes que poco entendían de aquella situación, los hermanos de mi madre...mis tíos. cada fin de semana, la visita de mi tía ( la mama de los dos enanos) hacia de aquella casa, la casa de la Ignorancia, era divertido.. había juguetes, risas, preguntas, y ninguna respuesta. cuando finalizaba la visita, entonces era cuando se suponía que yo no tenia que haberme enterado realmente de lo que ocurría, parece ser que se lo creían, ¿porque nadie me pregunto nunca, si realmente quería sentarme en aquella mesa con aquellos dos mocosos, que me querían y me odiaban, por tener padre y madre y por no ensuciarme nunca el vestido..? yo los quería, los quería muchisimo, pero llegue a odiarlos también, siempre me sentí culpable por ese odio, así que hasta mi adolescencia jamas se hizo notar, entendí que no podía ser un problema mas, aprendí a callarme a observar y a compartir a los que habían tenido solo dos hijos y de repente se vieron con dos mas caídos de el cielo ?? rectifico, del cielo no... de mi profesora de mentiras "mi Tía".
Un día decidí, después de comerme demasiadas y sentirme culpable por hacerles comerse otras tantas, que se acabo.. yo no pude decidir si me sentaba en aquella mesa, pero si podía decidir no sentarme mas, las circunstancias se pusieron muy a mi favor, por algo que sucedió hace ya unos cinco o seis años ,grite basta, me aleje de ellos, de algunos mas que de otros, no iba a morfarme mas a una familia a la que yo podía entender, pero que me había encasillado en un puesto que no me pertenecía, el de Ignorante...
Es verdad que la sangre tira, que los buenos recuerdos me estremecen a veces, que desearía saber, volver a ver la sonrrisa en la cara de mi abuela, sin el temor de que desaparezca tras el ruido de una puerta al cerrarse, si, es verdad.. también es verdad que las personas nacen y se hacen cada uno a su manera cogiendo un poco de aquí y de allí, de tu tía, de tu prima, de tu hemano, de tu madre ..yo ... tengo que ser una mezcla de todos ellos, de los que me acuerdo, de los que no, de los que están cerca y de los que no.
Lo que esta claro, es que los que vengan detrás mio en este árbol genealógico, mas parecido a una enrredadera, de mi parte no se van a librar ...
